ERA DE TRAPO, TENIA LOS PELOS DE ESTAMBRE NARANJAS Y USABA UNA CORBATA FLOREDA QUE CUIDABA MUCHO Y ODIABA QUE LA ENSUCIARAN O QUE SE LA ARRUGARAN, USABA UNA CAMISA DE CUADROS CON ESTAMPADO DE MARGARITAS, UN SOMBRERO DE PETATE CON UNA MARGARITA, YA QUE A EL LE GUSTABA CONVINAR SU ROPA, TENIA LOS OJOS VERDES Y GRANDOTES LO QUE LE HACIA CREERSE MUCHO POR ESOS OJOTES Y LARGAS PESTAÑAS.
ERA CHISTOSO Y DE BUENOS SENTIMIENTOS, LE ENCANTABA JUGAR CON LOS NIÑOS QUE LLEGABAN DE VACACIONES AL RANCHO, ODIABA A UN PERRO DEL TERRENO DE ALADO PORQUE SIEMPRE SE HACIA PIPI EN EL,
MUCHAS VECES ERA LLEVADO A OTROS TERRENOS PARA CUIDAR OTROS CULTIVOS ASI QUE SIEMPRE TENIA MILES DE HISTORIAS QUE CONTAR A SU AMIGO OTTO EL NIÑO DE UN RANCHO DE JUNTO QUE HIBA A PLATICAR TODAS LAS TARDES CON ESTROPAJO NOMBRE QUE ASI LE PUSO EL MISMO.
SU AUTOCONSEPTO DE ESTROPAJO ERA QUE ESTABA GUAPO, GRACIOSO, CARIÑOSO Y AMISTOSO Y DE ALTA AUTOESTIMA.
PERO AVECES UNA INMENSA TRISTEZA SE APODERABA DE EL CUANDO SE ENCONTABA SOLO Y SOLO OTTO ERA EL QUE LO PODIA CONSOLAR.
YA QUE PARA ESTROPAJO OTTO ERA EL MEJOR EJEMPLO DE AMISTAD QUE PODIA EXISTIR.
Y ESTA ES SU HISTORIA……
En un rancho alejado de la ciudad de México existía ESTROPAJO un pequeño espanta pájaros que cuidaba los cultivos de ese rancho.
Todas las mañanas al abrir sus ojos le daba gracias a la vida por ese hermoso trabajo que le permitía estar en la naturaleza.
Siempre esperaba a otto un niño que iba de vacaciones al terreno de alado y estropajo le contaba historias maravillosas y les contare la historia que le encantaba escuchar a otto.
El pajarito de piedra
Hubo una vez un pajarito de piedra. Era una criatura bella y mágica que vivía a la entrada de un precioso bosque entre dos montañas. Aunque era tan pesado que se veía obligado a caminar sobre el suelo, el pajarito disfrutaba de sus árboles día tras día, soñando con poder llegar a volar y saborear aquel tranquilo y bello paisaje desde las alturas. Pero todo aquello desapareció con el gran incendio. Los árboles quedaron reducidos a troncos y cenizas, y cuantos animales y plantas vivían allí desaparecieron. El pajarito de piedra fue el único capaz de resistir el fuego, pero cuando todo hubo acabado y vio aquel desolador paisaje, la pena y la tristeza se adueñaron de su espíritu de tal modo que no pudo dejar de llorar. Lloró y lloró durante horas y días, y con tanto sentimiento, que las lágrimas fueron consumiendo su piedra, y todo él desapareció para quedar convertido en un charquito de agua.
Pero con la salida del sol, el agua de aquellas lágrimas se evaporó y subió al cielo, transformando al triste pajarito de piedra en una pequeña y feliz nubecita capaz de sobrevolar los árboles. Desde entonces la nube pasea por el cielo disfrutando de todos los bosques de la tierra, y recordando lo que aquel incendio provocó en su querido hogar, acude siempre atenta con su lluvia allá donde algún árbol esté ardiendo.
A estropajo lo enorgullecía el saber que tenia a otto como amigo, lo cuidaba cuando estaba jugando junto a su rancho, veía que no se lastimara y otto en agradecimiento le llevaba galletas de trigo, las favoritas de estropajo.
Pero también existía pecoso, un perro que rodeaba el rancho y siempre se hacía pipi en estropajo cosa que le enojaba demasiado ya que cuidaba su corbata y su vestuario, entonces cada vez que ocurría otto le quitaba su ropa para lavárla.
Reían todo el tiempo y estropajo lo bromeaba llamando lo por su nombre (otto) y cuando otto le contestaba, le decía e noo noo tu noo otro y así continuamente y a otto le encantaba que lo bromeara.
Veían el atardecer y cuando llovía otto rápidamente lo tapaba con una bolsa. y así fueron los mejores amigos , pero un día los papas de otto decidieron que se mudarían y que no podían llevarse a estropajo porque era del terreno de junto y no de ellos .
Al despedirse estropajo no pudo contener las lagrimas lloro como nunca antes y otto por igual.
Otto prometió volver cuando vinieran los de su rancho de estropajo para pedirles permiso para podérselo llevar.
Así pasaron varios meses, estropajo se mojaba, no comía y una profunda tristeza lo invadía todos los días recordaba los buenos tiempos en donde platicaba con el su gran amigo.
Solo lo reconfortaba el saber que algún día le cumpliría la promesa de venir por el pero un día llego una noticia inesperada otto había muerto en un accidente con sus papas, para otto era algo que no podía resistir y se estaba dejando morir él para acompañarlo.
Hasta que un día se apareció una nubecita arriba de él y de ella cayo una cartita que decía.
Prometí venir y aunque no puedo estar allá abajo estaré siempre desde aquí, cuidándote ahora soy como el pajarito de piedra.
